Todas las ilustraciones de esta página son propiedad del autor, esta prohibida la reproducción y el uso de las mismas.
All illustrations in this site are intelectual property of the author. Their use and reprint are prohibited.

martes, 18 de febrero de 2014

¡Hola chiquilines!.
Esta semana les traigo una ilustración basada en la linda y talentosa ilustradora chilena Frannerd (Francisca Meneses), radicada en Berlín, Alemania.

Me encontré con su arte de casualidad cuando vi unos de sus vídeos en youtube (son muy divertidos, se los recomiendo), así que empecé a seguirla en varias redes sociales y me quedé super enamorada de sus ilustraciones. Son sencillas, ingeniosas, divertidas y muy pero muy tiernas. Decidí escribirle y decirselo personalmente. Creo que cuando una cree que alguien está haciendo las cosas bien, hay que decirselo ¿no? y más si es una ilustradora latinoamericana!... En fin, es todo...
No olviden seguirme tambien en:
www.facebook.com/jessicamenaillustration
Twitter:@jessilustra
Instagram: @jessemary

Besis!





jueves, 23 de enero de 2014


Ofelia

 En las aguas profundas que acunan las estrellas,
blanca y cándida, Ofelia flota como un gran lilio,
flota tan lentamente, recostada en sus velos...
cuando tocan a muerte en el bosque lejano.

Hace ya miles de años que la pálida Ofelia
pasa, fantasma blanco por el gran río negro;
más de mil años ya que su suave locura
murmura su tonada en el aire nocturno.

El viento, cual corola, sus senos acaricia
y despliega, acunado, su velamen azul;
los sauces temblorosos lloran contra sus hombros
y por su frente en sueños, la espadaña se pliega.

Los rizados nenúfares suspiran a su lado,
mientra ella despierta, en el dormido aliso,
un nido del que surge un mínimo temblor...
y un canto, en oros, cae del cielo misterioso.

II

¡Oh tristísima Ofelia, bella como la nieve,
muerta cuando eras niña, llevada por el río!
Y es que los fríos vientos que caen de Noruega
te habían susurrado la adusta libertad.

Y es que un arcano soplo, al blandir tu melena,
en tu mente transpuesta metió voces extrañas;
y es que tu corazón escuchaba el lamento
de la Naturaleza -son de árboles y noches.

Y es que la voz del mar, como inmenso jadeo
rompió tu corazón manso y tierno de niña;
y es que un día de abril, un bello infante pálido,
un loco miserioso, a tus pies se sentó.

Cielo, Amor, Libertad: ¡qué sueño, oh pobre Loca!
Te fundías en él como nieve en el fuego;
tus visiones, enormes, ahogaban tu palabra.
-Y el terrible Infinito espantó tu ojo azul.

III

Y el poeta nos dice que en la noche estrellada
vienes a recoger las flores que cortaste,
y que ha visto en el agua, recostada en sus velos,
a la cándida Ofelia flotar, como un gran lis.

Arthur Rimbaud